A través de una búsqueda exhaustiva en bases de datos de renombre como PubMed, Scopus, MEDLINE e información de la Biblioteca del Congreso Nacional de Chile (BCN), un equipo de seis investigadores integrado por el académico UAC, Dr. Diemen Delgado, desarrolló un estudio encaminado a describir los efectos de la exposición a la fibra de amianto, la legislación vigente sobre su manipulación, la prohibición de su uso en Chile, entre otras cosas. Este trabajo fue publicado en la Revista Colombiana de Salud Ocupacional.
El amianto (o asbesto) es una fibra fina pero rígida, formada por derivados químicos del hierro, el sodio y magnesio. Dada su resistencia al calor y la corrosión, este material ha sido usado tradicionalmente en la industria, la agricultura y la construcción. Al tratarse de un aislante térmico, es posible hallarlo en casas construidas hace más de treinta años, en forma de placas de yeso principalmente.
Sin embargo, está clasificado por la IARC (Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer) y la OMS (Organización Mundial de la Salud) como un agente carcinógeno para los seres humanos. Tanto así, que se estima que este mineral es responsable de aproximadamente la mitad de las muertes por cáncer ocupacional en todo el mundo, lo que representa un importante problema de salud pública.
Enfermedades como la asbestosis, placas pleurales, mesotelioma y hasta cáncer pulmonar, pueden ser provocadas por la inhalación de este polvillo en suspensión, la forma más común en que se presenta. Según el estudio, no sólo los trabajadores sufrirían una fisiopatología, sino que sus familiares estarían igualmente expuestos a los efectos de este agente nocivo.
El estudio abordó el histórico caso de la empresa Pizarreño, en el que cientos de trabajadores, sus familias y poblaciones aledañas a esta empresa se vieron afectados por la exposición al amianto con consecuencias incluso fatales. Desde allí, fines de la década de 1990, el Estado de Chile ha suscrito a convenios internacionales e implementado medidas para restringir la producción, uso, manipulación y disposición del amianto.
Es importante destacar que la asbestosis es una enfermedad de desarrollo lento y generalmente requiere una exposición prolongada al amianto para que se desarrolle. Además de una detección temprana, el evitar la exposición a este material es la forma más efectiva de prevenir la aparición y prevalencia de enfermedades derivadas de la misma, según los investigadores. Para una revisión completa del estudio, compartimos el siguiente enlace:
https://revistas.unilibre.edu.co/index.php/rc_salud_ocupa/article/view/10560/11275